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La parrilla tiene la capacidad de convertir melocotones dulces y jugosos de un refrigerio sobre el fregadero en un impresionante postre o guarnición con nada más que calor. Los duraznos a la parrilla son el tipo de magia que ocurre en el crepúsculo de una parrilla caliente cuando la cena está casi lista, y la fruta dulce combina mejor con vino frío y helado para el postre.
La verdad es que los duraznos a la parrilla son sorprendentemente fáciles. Solo necesitas melocotones frescos y aceite de oliva, aprovecha al máximo el calor residual de una sección refrigerada y puede servir como acompañamiento de carnes a la brasa o convertirse en un espectacular postre de verano. Cómo preparar los mejores melocotones a la plancha en solo cuatro pasos.
Los mejores melocotones para asar
Cuando se trata de asar a la parrilla, busque duraznos con hueso que aún estén firmes después de exprimirlos. Los duraznos realmente maduros tienen más azúcar que se quema rápidamente y son demasiado tiernos para soportar el calor.
Asar duraznos en mitades en lugar de rodajas evita que se cocinen demasiado y hace que los duraznos sean más fáciles de manipular sin que las rodajas se deslicen de la rejilla de la parrilla. Untar las mitades de durazno con aceite de oliva evita que se peguen y no se quema como el azúcar o las especias cuando se agregan a la fruta.
Use fuego medio para duraznos a la parrilla
Por lo general, aso los melocotones después de la cena, cuando las brasas se han enfriado. Sin embargo, los melocotones perfectos son una buena excusa para encender la parrilla, por lo que el fuego medio es mejor si planeas asar melocotones a la parrilla. Asa los duraznos sin tapar de cuatro a cinco minutos por cada lado. Resista la tentación de volver a colocar los duraznos en la parrilla una vez; Las buenas marcas de la parrilla en los duraznos son el resultado de la paciencia (y las parrillas de cocción limpias).
Los duraznos terminados deben estar más tiernos pero no desmoronarse, con marcas de parrilla prominentes. La mayoría de las veces, la piel del durazno está suelta y se cae. Siéntase libre de quitarlos con pinzas antes de servir si lo desea.
Cómo servir y comer duraznos a la parrilla
Aquí le mostramos cómo ser el héroe de su próxima comida al aire libre de verano: lleve una bandeja de helado y cucharas a la mesa, agregue duraznos asados calientes al helado y deje que todos coman. Planee tener al menos una mitad de durazno por persona. Y por si fuera poco, los duraznos a la parrilla también son una de mis guarniciones favoritas para el lomo de cerdo a la parrilla.
INSTRUCCIONES
- Prepara la parrilla. Enciende una parrilla de gas a fuego medio-alto. Si cocina sobre carbón, asa los duraznos después de que todo lo demás haya sido asado.
- Cortar por la mitad y picar los melocotones. Pasa un cuchillo afilado a lo largo de la costura de cada durazno para cortarlo por la mitad. Retire el hueso y cepille cada lado cortado con aceite de oliva.
- Ase a la parrilla con el lado cortado hacia abajo a fuego medio-alto durante 4 a 5 minutos. Coloque los duraznos con el lado cortado hacia abajo en la parrilla y cocine, sin tocarlos, hasta que aparezcan las marcas de la parrilla, de 4 a 5 minutos.
- Voltee los duraznos y cocine hasta que estén tiernos, de 4 a 5 minutos. Voltea los duraznos y asa a la parrilla hasta que estén carbonizados y los duraznos estén suaves, de 4 a 5 minutos más.
- Sirva los duraznos. Retire de la parrilla. Sirva duraznos a la parrilla con helado de vainilla o calabaza moscada, o incluso como guarnición de cerdo a la parrilla.
